Admítelo, aunque eres muy buena persona, eres desordenado y lo sabes. Haz que lo sepan también los demás con este felpudo tan original.
Si eres el típico amigo que cuando recibe visita en casa suelta la frase típica de "No te asustes que tengo la casa desordenada" o "Uff, me has pillado justo cuando iba a recoger", no te preocupes, no estás solo. De hecho, puede hasta tener ventajas, porque ser desordenado en ocasiones es sinónimo de ser muy inteligente y creativo.